El Gobierno de EE.UU. y la Fiscalía de Nueva York demandaron este jueves a la financiera MoneyGram, una de las líderes en el envío de remesas, por "prácticas abusivas" hacia sus clientes, generalmente inmigrantes que envían dinero a sus familiares en otros países.

MoneyGram, que ha tenido numerosos problemas con la justicia en los últimos años, está acusada ahora de violar "sistemáticamente" las leyes de protección al consumidor y "dejar tiradas a las familias" al no entregar a tiempo sus remesas en el extranjero, dejándolas "esperando el dinero".

Según la demanda, interpuesta en un tribunal de Nueva York, la entidad no informaba adecuadamente a sus clientes sobre cuándo estarían disponibles sus remesas, equivocándose repetidamente y ocasionando retrasos, y tampoco cumplía las políticas para ayudarles y subsanar errores.

"Hoy, el CFPB y @NewYorkStateAG Letitia James anunciaron la presentación de una demanda contra MoneyGram por violar sistemática y repetidamente varias leyes de protección financiera del consumidor y dejar a las familias abandonadas", se lee en un mensaje en redes sociales de la Oficina de Protección Financiera al Consumidor.

Asimismo, se acusa a MoneyGram de mantener las transferencias en un "limbo" una vez hacía las revisiones antifraude, con lo que sus clientes se quedaban con las manos vacías durante "días o semanas" hasta que se completaban las remesas o los reembolsos solicitados por el emisor.

De acuerdo con los datos de la Fiscalía, en 2020 más de 600.000 personas enviaron o recibieron dinero a través de esta empresa solo en Nueva York, muchos de ellos inmigrantes y refugiados que ayudan a sus familias en su país de origen y tienen bajos recursos o limitaciones financieras.

"MoneyGram se ha pasado años fallando a sus clientes e incumpliendo la ley, ignorando las quejas y las advertencias gubernamentales", dijo el director de la Oficina de Protección Financiera al Consumidor, Rohit Chopra en un comunicado.

La fiscal neoyorquina, Letitia James, criticó a MoneyGram por "decepcionar" a las comunidades inmigrantes que confiaron en la entidad para enviar fuera el "dinero que tanto les cuesta ganar" y se comprometió a "corregir sus prácticas ilegales y evitar que haga más daño".

"Nuestras comunidades inmigrantes confían en @MoneyGram, uno de los mayores proveedores de transferencias de dinero, para enviar dinero al extranjero, pero la compañía los dejó en la oscuridad repetidamente sobre sus transacciones", señaló la fiscal James en un mensaje en redes sociales.

En los últimos trece años, MoneyGram ha pagado más de 264 millones de dólares en multas y sanciones por violar las leyes antifraude y de protección al consumidor a nivel federal y estatal en Estados Unidos.

En un comunicado, MoneyGram, con sede en Dallas, dijo que planea defenderse de la demanda “frívola”, y que su programa de cumplimiento fue efectivo y que los consumidores no sufrieron daños, según cita el NYPost.

“La CFPB y su director entraron en discusiones con la mente cerrada y lamentablemente optaron por hacer demandas cada vez más injustificables y sin precedentes”, dijo la compañía. “En última instancia, MoneyGram se negó a aceptar un acuerdo injusto”.