Ronie Valle llegó temprano como todos los días a su trabajo, en este caso con tristeza y al mismo tiempo agradecido de estar bien y con vida luego del incendio en la ferretería ubicada en el 138-18 de la avenida 101, que en la noche del miércoles estuvo envuelta en llamas.

El fuego no dejó víctimas.

"Gracias a Dios todos están bien, los compañeros de trabajo, nadie le paso nada, eso es lo más importante. Lo material, usted sabe, eso vuelve, las vidas no vuelven", dijo Valle.

Como él, todos los demás compañeros y el propietario del lugar visiblemente afectados decidieron abrir y comenzar a limpiar lo que quedó, luego del incendio de 5 alarmas que ocurrió antes las 7 de la noche.

"A la altura de esa casa subió el fuego. El humo salió espeso, aqui estaba bien oscuro…no se podía moverse uno", dijo Saúl Jordán, vecino.

Mas de 200 bomberos de 44 unidades acudieron al llamado de emergencia.

Las llamas eran tan intensas que consumían todo a su paso.

En su momento el departamento de Bomberos puso un mensaje en redes sociales con imágenes del fuego y con el anuncio de que un oficial de bomberos daría un reporte sobre el incendio en Queens.

 

De acuerdo a las autoridades, la poca presión de agua de los hidrantes causó que les llevara varias horas sofocar el fuego.

El espeso humo negro también dificultó el trabajo de los bomberos.

Y aunque ninguna casa aledaña resulto afectada por las llamas, los vecinos tuvieron que colocar cinta adhesiva en las puertas para evitar que el humo los afectara.

-¿Le tapó la puerta?   

"Sí, eran como las 9, le dije que si podía entrar y me dijo que sellara las puertas, le tuve que dar 'tape'", agregó Jordán.

Según los bomberos, posiblemente materiales de construcción como alambres y tubos de plástico avivaron aun más el fuego.

"Las cosas de electricidad, 'fiber glass' les hizo mas difícil", dijo Valle.

Las autoridades investigan las causas que provocaron el incendio.