Gabriel de Jesús Marín Serna no era un hombre joven cuando se mudó con su familia a Nueva York en 2004, pero creía que encontraría una vida mejor aquí que en su Colombia natal. Ciertamente encontró una vida feliz.
Su nieto, Mauricio Serna, recuerda la alegría de su abuelito.
"Él era la vida de la fiesta", dijo Mauricio. "Siempre le gustó bailar y hacer reír a todo el mundo”.
Serna, de 84 años, llevaba un año en el Centro de Rehabilitación de Nueva York, en Astoria, y sufría de cáncer de páncreas. El 6 de abril, la familia recibió una llamada diciendo que Serna mostraba síntomas de coronavirus y que iba a ser transferido al Hospital Mount Sinai en Queens. Serna murió dos días después.
El nieto Serna dice que su abuelo era todo familia. Estuvo casado con Leonela Marín Sánchez durante más de 60 años. El matrimonio tuvo 10 hijos, seis niñas y cuatro niños.
"Yo fui su primer nieto", dijo Mauricio, "Ni siquiera puedo contar cuántos nietos tuvo, y una tonelada de bisnietos".
Serna fue profesor universitario en Colombia durante 30 años, pero después de que se mudaron a Nueva York se pasó los días echando una mano a su mujer en su guardería de Queens hasta que esta cerró en 2008. Lo que sea que hiciera, siempre se trataba de la familia.
"Le encantaba dar paseos con mi abuela. Siempre nos contaba pequeños chistes", dijo Serna. "Fuimos realmente bendecidos por tenerlo en nuestras vidas".
Una de las hijas de Serna y la madre de Mauricio, dijo que su padre "siempre estaba preocupado por la familia",
“Siempre trató de hacer a todos felices. Siempre trató de unir a la familia”, detalló la hija y madre.
Ahora esta familia llora la pérdida de su patriarca, se prepara para llevarlo a casa para que descanse en su Colombia natal y recuerda al hombre que amaron.
"Era una persona muy servicial, amable, dulce y buena", dijo el nieto Mauricio. "Siempre hizo que todos se sintieran felices".
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