Debido a la crisis económica que trajo consigo la pandemia, miles de taxistas se vieron obligados a devolver las placas de sus vehículos de servicio a la Comisión de Taxis y Limusinas.  Ahora muchos trabajan en autos particulares, pero esto conlleva riesgos que podrían evitarse de contar con las placas para taxis.  

"El trabajo de nosotros es muy difícil, arriesgado y peligroso".

Esto es lo que dice Fernando Reynoso, quien lleva 35 años tras el volante, circulando por las duras calles de la ciudad de Nueva York. Y es así como ha podido mantener a su numerosa familia.

"Yo tengo seis muchachos, hijos. Gracias a Dios los he mantenido a todos, con este guía, de este volante, estoy taxeando desde 1984 y estoy orgulloso de ello, y estoy orgulloso de mí porque hay una (hija) que es paramédico, otra que es policía, hay otro que es abogado", dice Reynoso.

Como él, 97,000 taxistas conducen un auto con placas otorgadas por la Comisión de Taxis y Limusinas o TLC de la Ciudad. Sin embargo, más de 5,000 choferes con licencia de taxistas utilizan sus vehículos particulares, sin placas TLC. Pues durante la pandemia, más de 30,000 placas de taxis fueron devueltas a la Comisión de Taxis y Limusinas en 2020, 2021 y 2022, ya que los choferes no podían pagar el costoso seguro, por falta de clientes.

Esto es una situación muy seria, porque no tienen el seguro apropiado, no tienen el vehículo apropiado y están trabajando en una. Industria que tiene reglas y regulaciones", dice Fernando Mateos, vocero de la Federación de Taxistas de Nueva York.

Reynoso nunca sale de su casa sin abrazar a sus seres queridos, y aunque utiliza el cinturón de seguridad, es el seguro para taxis que la ciudad requiere, lo que le da algo de tranquilidad.

"Uno se encomienda a Dios pues uno sabe que sale de su casa y no sabe si puede llegar con vida. Tengo una cobertura que me cubre a mí de cualquier accidente que tenga un pasajero en el carro mío. Dice que te dan 100,000 pesos (dólares) por cada persona, ahí tiene todas las deducciones, todo, yo pago por este seguro alrededor de 7,000 dólares al año", agrega Reynoso.

Los taxistas sin placas reguladas por la TLC, no pueden obtener este seguro.

"Hay muchos choferes que por motivos no tiene sus placas de taxi y andan corriéndose el riesgo montando gente en la calle, no pueden usar el dispositivo porque tiene placa personal, placa privada, y entonces ellos tienen más riesgo que uno", dice Reynoso.

Y aunque la Comisión de Taxis y Limusinas ha devuelto cerca de 2,500 placas, aún quedan más de 27,000 retenidas.

"Para proteger a todos estos taxistas que por tantos años han mantenido su tablilla de taxi igualmente que su licencia, entonces nosotros debemos protegerlos para que ningún taxista ande ilegalmente manejando un carro privado y montando pasajeros", concluye Antonio Cabrera, presidente de la Federación de Taxista de Nueva York.

La Comisión de Taxis y Limusinas aseguró que continuarán otorgando nuevas placas para aumentar el flujo de vehículos públicos.