Este podría ser uno de los últimos recorridos que Dan y Gloria realizan en la iglesia evangélica “La Hermosa”, en la cual son pastores.

“Es una decisión que la tuvimos que estudiar y bajo mucho dolor y lágrimas reconocer que es tiempo de hacer este proyecto", dijo Gloria Feliciano, pastora.

Esta iglesia ha estado en este lugar por cerca de 60 años, y fue la primera de la denominación discípulos de Cristo en la ciudad. En la actualidad cuenta con poco menos de 90 feligreses y las reparaciones al edificio ascienden a mas de un millón de dólares, debido a la falta de aire acondicionado y fallas eléctricas en el salón principal, filtración de agua y falta de accesibilidad a personas discapacitadas.

Por esta razón, la iglesia propuso a la ciudad demoler el inmueble y construir otra iglesia dentro de un edificio que también tendría 160 departamentos, entre ellos 50 de vivienda asequible. 

“La iglesia no tiene los fondos necesarios para reparar este edificio, cuesta un dineral arreglar este edificio tan grande y tan viejo", dijo por su parte el pastor Daniel Feliciano.

El proyecto también albergaría una escuela de música, que será gratis para niños hasta 12 años de edad.

Este edificio tiene mas de 100 años de existencia, inicialmente era utilizado como un club de música, especialmente de jazz, hasta que en los años 60 fue comprado e inició la historia de la iglesia.

Esto ha causado nostalgia a feligreses que tienen toda su vida asistiendo a este recinto.

“Esta iglesia para mi ha sido como otra familia", reveló una mujer que asiste a la iglesia. 

El reedificar iglesias para incorporar vivienda se ha convertido en una práctica común de centros religiosos para poder sobrevivir. Desde 2014 el departamento de preservación y desarrollo de vivienda ha financiado 13 proyectos que incluyen iglesias, mientras que otros centros religiosos lo han hecho a través de desarrolladores privados.

“El costo de eso es mucho más de lo que puede proveer diezmos y ofrendas por lo tanto las iglesias ha tenido que ser creativas", explicó Feliciano. 

Sin embargo, la junta comunitaria de la zona votó en contra del plan debido a que la iglesia aun no ha escogido al desarrollador del proyecto inmobilario. Este voto es solo una opinión, por lo que la iglesia espera la aprobación de la comisión de planeación y del concejo municipal para iniciar la demolición en 2020.