La tormenta tropical Dorian amenazaba con golpear de forma directa a Puerto Rico el miércoles luego de que, según los meteorólogos, hizo un giro de última hora en su trayectoria.

El fenómeno meteorológico podría aproximarse a fuerza de huracán conforme se acerque al territorio estadounidense.

Se prevé que la tormenta pase por encima o cerca de la región occidental y central de Puerto Rico el miércoles, por lo que las autoridades alertaron a la población de posibles deslaves, inundaciones y apagones.

El presidente Donald Trump declaró una emergencia el martes en la noche y ordenó la entrega de asistencia federal a las autoridades locales.

Por su parte, Roberto García, director del Servicio Nacional de Meteorología de Estados Unidos en San Juan, expresó: "Se sentirán vientos con fuerza sostenida de tormenta tropical en prácticamente toda la isla".

También advirtió que el pronóstico podría cambiar ya que tormentas como Dorian, sin un vórtice bien definido, suelen presentar cambios súbitos.

Durante la madrugada de este miércoles, Dorian se encontraba a unos 390 kilómetros (240 millas) al sureste de Ponce, Puerto Rico.

El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos dijo que se fortaleció ligeramente y tiene vientos máximos sostenidos de 96 kilómetros por hora (60 mph) y avanza en dirección noroeste a 20 km/h (13 mph).

También se calcula que el fenómeno arroje entre 10 y 15 centímetros (4 y 6 pulgadas) de lluvia con precipitaciones aisladas de hasta 20 centímetros (8 pulgadas).

El cambio en el trayecto de la tormenta causó preocupación en muchos de los habitantes del territorio estadounidense.

En donde aún hay alrededor de 30,000 viviendas con lonas azules en lugar de techos casi dos años después del paso del huracán María.

Y también unos 3.2 millones de pobladores dependen de una endeble red eléctrica que sigue siendo propensa a apagones después de ser destruida por la tormenta de categoría 4.

El Centro Nacional de Huracanes emitió una alerta por huracán para Puerto Rico y avisos por tormenta tropical para Puerto Rico, Vieques, Culebra y las Islas Vírgenes Estadounidenses. Además hay una alerta en vigor por tormenta tropical en República Dominicana, desde Samaná hasta Puerto Plata.

Dorian ya causó apagones y derribó árboles en Barbados y Santa Lucía y una trayectoria aún incierta a largo plazo coloca a la tormenta cerca de Florida para el fin de semana.

A pesar de que altos funcionarios de Puerto Rico aseguraron que están preparados para la llegada de la tormenta y cuentan con equipamiento suficiente, un par de alcaldes, incluyendo algunos en la región occidental, indicaron que no hay generadores suficientes ni se instalaron adecuadamente los albergues necesarios.

La gobernadora de Puerto Rico, Wanda Vázquez, instó a los residentes en zonas con tendencia a inundarse o en lugares en reparación a trasladarse a uno de los 360 refugios de la isla, desde el martes por la noche.

Por su parte, el secretario de Vivienda puertorriqueño, Fernando Gil, señaló que en la zona que se espera que sea la más afectada por Dorian hay entre 9,000 y 13,000 casas todavía en rehabilitación.

Las autoridades de la isla informaron que las escuelas públicas y las oficinas gubernamentales estarán cerradas al menos hasta el jueves.